Ventana rota

La teoría de las ventanas rotas dice que si un edificio tiene todas las ventanas en correcto estado, nadie haría nada contra él. Sin embargo, si una sola estuviera quebrada, las personas se verían en la tentación de romper las demás, creando un efecto destructor. Todo lo anterior tiene nada o poco que ver con lo que viene a continuación, pero es que se me ocurrió colocarlo.

En estos días fui a comer con mi amigo Freddy en Subway. Ingerimos la comida y nos fuimos del lugar. Mientras me acercaba al carro, noté que estaba algo diferente: habían roto la ventana del conductor. Dije "Freddy, no hay vidrio" a lo que el respondió que pensó que había dejado la ventana abierta.

Nos acercamos para ver los trozos diminutos de vidrio por todos los asientos. Mientras maldecía la inseguridad reinante en mi país, Freddy me dijo mientras levantaba una caja vacía "¿Qué había aquí?" Allí se encontraba el reloj que mi hermana le regalaría a mi cuñado y que me había dejado para que él no lo encontrara. Después de todo, el plan había funcionado a la perfección: no lo encontraría jamás.

Eso fue lo único que se llevaron (además de mi sensación de seguridad) porque no había nada de valor. No quedaba otra que irnos del lugar. Como estaba haciendo calor y estaba de mal humor, Freddy intentó -infructuosamente- de hacerme sentir bien. Me dijo "Saca la cabeza por la ventana" Obviamente me negué al responder "¡No soy un perro!"

Al día siguiente le pusieron un nuevo vidrio, tan transparente que no sé si deba ponerle una X de color para que las palomas no choquen con él. Comencé a sentirme bien, un poco más seguro, hasta que quise mascar un chicle. También se los habían llevado. Muertos de hambre.

Publicado el 16 de diciembre de 2o1o