Diario de un enfermo con chikungunya

1. ¿Qué es ese dolor en el coxis? Es tan inapropiado y fuera de lugar. Espero que no sea grave

2. ¿Qué hay de este dolor en los hombros, rodillas, pulgares? Espero que no sea la chikungunya. Pero si es, supongo que no quedará sino sufrir el embate de la enfermedad.

3. Ese duende verde que me saluda desde la ventana.. ¿existirá de verdad o es producto de alguna alucinación por la fiebre que sufro?

4. ¿Por qué habré dejado la afeitadora en un lugar tan bajo? Me duele mucho agacharme. Creo que la única solución posible es dejarme crecer la barba hasta mejorar.

5. Me duelen tanto las manos. Nunca me había producido tanto sufrimiento agarrar el jabón para bañarme. Pero no me puedo ir sucio al trabajo.. ¿o sí? No, no puedo

6. Desearía no haberme burlado tanto de mis amigos que sufrieron esta enfermedad antes que yo. Espera un momento, ¿realmente lo lamento? No, no me arrepiento de nada. Fue muy divertido todo.

7. Quisiera no tener que subir unas escaleras para llegar a mi trabajo. No queda otra salida que maldecir por cada escalón subido. Debe ser un espectáculo muy entretenido de ver: un hombre diciendo groserías por cada paso que da.

8. Un amigo me ha dicho que apenas comienza todo, que en unos días comenzaré a "sentir que muero lentamente" Ese es el discurso optimista que necesitaba recibir.

9. Una amiga me ha dicho que me tengo un salpullido en la cara, obviamente uno de los síntomas de la enfermedad. Falsa alarma, sólo son dos granos. Debería estar agradecido, supongo.

10. No estoy seguro si esta piquiña en todo mi cuerpo es consecuencia de la chikungunya o si es sarna. Desearía no haber estado jugando con esos perros callejeros antes. Tal vez eso alejaría toda duda.

11. Caminar es una empresa difícil. Pensé que hacerlo lentamente y con estilo podría confundir a la gente. Pensarían "¿camina así por gusto o está enfermo?" Nadie se lo creyó, todos saben que estoy enfermo.

12. ¡Oh, no! Un mosquito me ha picado. Si se va volando contagiará a alguien más. Bueno, qué mas da. Luego no digan que no me gusta compartir.

13. La gente continúa dándome consejos raros. Que si beba aquello, que si pruebe esto. Lo que menos acepto es lo de la sopa de patas de gallina. Si esa es la cura, prefiero estar enfermo.

14. Ya me siento mucho mejor. Mis piernas no sufren, aunque sí las manos y los hombros. Pero ya no es nada. Sólo queda mejorar. Aunque mi madre me ha dicho que puedo reincidir durante los próximos meses. Quizás la próxima vez me vaya diferente.
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Publicado el 20 de septiembre de 2o14