Lluvia con sol



Ayer me levanté muy temprano y me di cuenta que el cielo estaba todo nublado. Comencé a tomar la ropa que me iba a poner y opté por un suéter. De esa manera no iba a congelarme en el trabajo.
Entonces me bañé para salir a comprar el periódico. Mientras me acicalaba, algo pasó con el cielo. Cuando salí estaba despejado. Hacía calor. El suéter era una mala opción, me puse una camisa manga corta porque no me iba a cocinar.
Me vestí y salí. Regresé a mi casa con el periódico. Me disponía a desayunar. Entonces, mi olfato comenzó a sentir un aroma agradable: a tierra mojada. Me puse a pensar en cuanto me gusta ese olor, hasta que caí en cuenta de que debía estar lloviendo.
Me asomé a la ventana y sí: estaba cayendo una lluvia bastante fuerte. Desayuné y agarré el suéter de nuevo. Eso de morir congelado le va muy bien a Jack o John (no me acuerdo el nombre del tipo de Titanic), pero a mí no.
Iba camino al trabajo cuando salió de nuevo el sol. Me quité el suéter para no comenzar a sudar como pollo en un asador. Cuando entré a la oficina, se desató un diluvio como no lo había visto en años.
Era tal la lluvia, que me puse a esperar si pasaba un barco muy grande con parejas de animales dentro. Pero nada pasó, excepto que escampó nuevamente. Y así fue todo el día, como un constante déja de temperaturas disparejas.
Ese es el problema con nuestra época de lluvia. Que no es ni tan-tan. Es una montaña rusa de nubes llenas de un juego extraño. Por eso, te regalo un manual de supervivencia para el clima venezolano:
1. Usa más bloqueador solar cuando parezca que va a llover
2. Si no sabes si usar sombrilla o paraguas, sal con los dos
3. Como regla general, si te pones suéter, hará calor. Mientras, si usas ropa ligera, va a llover seguro
4. Siempre debes estar pendiente de los reportes del tiempo. Observa bien lo que te dicen. Así sabrás que va a ocurrir lo contrario a lo que predicen
5. Si eres mujer, el día que te pongas aquellas sandalias que tanto te costaron y que causan una envidia sobrehumana en tus compañeras de trabajo. Ese día lloverá y meterás los pies en charcos de agua que son caldos de cultivos para nuevos tipos de hongos desconocidos por la ciencia
Creo que con eso basta. No digas que nadie te dijo.

Publicado el o5 de agosto de 2oo9

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