Cómo hacer una canción para bailar



Pareciera que tener un éxito musical es una tarea titánica, pero no hay nada más lejos de la realidad. Con las últimas canciones que suenan sin parar, todo se ha convertido en algo tan repetitivo que he podido descubrir una receta. Los ingredientes son:

-Un ritmo reciclado. Ya no es necesario pasar horas tratando de explorar nuevos e interesantes sonidos. No, ya no más. Déjese de esa pérdida de tiempo y use algunos samples que ya hayan usados éxitos del pasado. Claro, que para esto necesita dinero para pagar los derechos de autor, pero las regalías devolverán la inversión.

-Las manos arriba. No, no se trata de un atraco. Toda canción que se digne de ser bailable pondrá a prueba la fiabilidad del desodorante suyo y el del resto. Todavía no entiendo por qué, pero la gente responde. Para eso, use también las demás variantes, como "manos al cielo" o "manos al aire" y verá como los escuchas se rinden.

-La cintura acá y las piernas allá. Algo relacionado con el punto anterior y con la falta de creatividad al escribir una letra decente, está dictarle a la gente cómo debe moverse. Atrás quedaron las coreografías para aprender de los vídeos musicales. No, ahora basta con decirle a la gente como bailar y listo. Esa es toda la canción. Puede ser algo así como "Una mano en la cadera, una pierna a la izquierda, mueve la cabeza, baja y luego salta"

-Yeah. Sí, así nada más. Coloque un "¡Yeah!" por acá y uno por allá. Acompañe ese monosilábico inglés con uno que otro gemido o jadeo y ya tiene el coro, estrofas y puentes necesarios.

Mézclese, sirva en una discoteca y espera por las regalías
___
Posteado el 27 de septiembre de 2o11

No hay comentarios: