Yo no te extraño, Movistar

En estos días, he recibido un correo de mi operadora telefónica Movistar. Dicen que me extrañan y que debería hacerle una visita a su página web. Bueno, eso de que me extrañan no me sorprende (es decir, yo también lo haría), pero yo no los extraño porque:

1. Cada vez que el teléfono se queda sin señal, le mento la madre a todos sus trabajadores. Por cierto, si me dan un listado de su personal, harían todo más sencillo.

2. Me mandan mensajes estúpidos todo el tiempo. Que si "Revisa tu horóscopo", "Este es el nuevo tono de espera", "Suscríbete a noticias que puedes leer en Internet completamente gratis" En serio, basta.

3. Esas llamadas para ofrecerme cosas que no quiero. Yo he desarrollado un talento para colgar el teléfono con educación cada vez que me llaman queriendo que cambie mi plan. Y lo hacen en la hora en la que almuerzo, para más detalle. Aunque cualquier horario es molesto.

4. Tienen un vocero que habla muy mal. En Venezuela tuvieron a personajes con gran presencia, seriedad y dicción para promocionar la marca. Luego, les redujeron el presupuesto, y contrataron a un muchacho con un afro y que habla pésimo, como un maleante. No sé si me están vendiendo un producto o asaltándome.

5. Las horas en espera por su atención. La última vez que me acerqué a uno de sus centros de atención al público, pasé dos horas sentado. Así se gana uno el odio secreto de las personas.

6. Les pagan a sus empleados con conejos y no con dinero. O esa es la explicación más sencilla para comprender por qué todos sus trabajadores parecen estar molestos todo el tiempo.

7. Me cobran todos los meses. Si quisieran que los extrañe, dejen de cobrarme. Dejen que pase un mes en sana tranquilidad. Es más, subo el requisito: un año o cinco de servicio gratis. Quizás así, algún día pensaré en ustedes con amor.

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Publicado el 15 de marzo de 2o15